Probablemente el nombre de Elisa Torres Durney no le sea muy conocido sobre todo porque no ha habido mucha cobertura periodística en torno a sus actividades, pero Elisa es una joven de Villa Alemana de tan solo 17 años y recientemente fue seleccionada entre las 50 mejores estudiantes del mundo, siendo la única candidata de nuestro país, al premio Global Student Prize 2023, un importante título que busca resaltar el esfuerzo de quienes, a través de sus iniciativas, transforman al mundo a su corta edad.
Lo interesante, además de su nominación en este premio internacional, es por las razones de su inclusión dentro de este certamen. Y es que ella, durante la pandemia que afectó al mundo y en especial a nuestro país con las limitaciones de asistencia a colegio, y como se indica en la breve biografía que la describe, «Cuando comenzó la pandemia de COVID-19 y el mundo entró en confinamiento, Elisa quería aprovechar el tiempo libre a su disposición, por lo que comenzó a buscar oportunidades de aprendizaje. Cuando encontró un curso introductorio de computación cuántica, marcó el comienzo de un nuevo capítulo para ella».
Con este nuevo interés, decidió ser la fundadora de “Girls In Quantum”, un proyecto sin fines de lucro que acerca la computación cuántica a cualquier estudiante del planeta, poniendo el foco particularmente en niñas.
“Girls In Quantum es una organización sin fines de lucro. Brindamos recursos educativos gratuitos para niñas y estudiantes de todo el mundo para que puedan involucrarse en el campo de la computación cuántica”, señaló en primera instancia Elisa Torres a La Estrella de Valparaíso en una entrevista.
“Hemos realizado más de 150 publicaciones educativas sobre computación cuántica, organizando seminarios en línea con expertos internacionales e impactando a niñas y estudiantes de más de 20 países”, agregó.
Elisa fundó Girls in Quantum para que más niñas se interesen en la tecnología y mostrar lo divertido e interesante que podría ser el tema. Comenzó a filmar videos y escribir blogs para explicar en qué consistía este campo, desde Qubits, bits y criptografía cuántica hasta computación cuántica en farmacia. Después de contarles a otros sobre sus videos, Elisa recibió tres mensajes de interés de niñas en África, España y Estados Unidos. Fueron las primeras en convertirse en embajadoras de Girls in Quantum. A través de un gran esfuerzo y colaboración, Girls in Quantum ahora tiene estudiantes de 11 países en el equipo: juntos, lo han convertido en una organización internacional que ha impactado a estudiantes de 21 países con recursos educativos gratuitos en inglés, español y tamil.
Con respecto a la nominación, indicó en la entrevista a La Estrella de Valparaíso que se enteró de este “reconocimiento hace algunos días atrás a través de una video llamada. No lo podía creer. Fue un muy lindo momento y estoy agradecida de que hayan reconocido mi trabajo y el impacto de Girls In Quantum”.
Finalmente, manifestó que “este reconocimiento significa un montón para mí, puesto que visibiliza mi misión por democratizar el conocimiento de la computación cuántica con más estudiantes y por sobre todo niñas. De esta manera espero poder colaborar con nuevos estudiantes y personas que nos ayuden a seguir creciendo en Chile y en otros países, con más recursos educativos y mentores”.
Según se indica en la web de The Global Teacher Prize, con los fondos del Global Student Prize, Elisa ampliaría la actividad de Girls in Quantum con el objetivo de llegar a alrededor de 10,000 estudiantes en 50 países para acceder a la educación STEM y cerrar las brechas existentes. Hasta ahora, el grupo ha funcionado únicamente con el apoyo de voluntarios y la ayuda en especie de algunas empresas, pero esto no es sostenible a largo plazo. Elisa quiere proporcionar becas para cursos de computación cuántica presenciales y en línea, crear eventos dirigidos por expertos para la organización (cursos, seminarios o hackathons), traducir los materiales educativos del grupo a diferentes idiomas y pagar los procesos legales y la gestión administrativa que la organización necesita. A largo plazo, Elisa quiere desarrollar una aplicación móvil que recopile todos los recursos educativos de Girls in Quantum para facilitar el acceso.
La temática respecto a computación cuántica y su importancia como tecnología en un futuro cercano ya lo hemos conversado con anterioridad. Mencionamos como en Estados Unidos el presidente Biden había firmado la Ley Quantum de Preparación para la Ciberseguridad.
Según se indicaba, «el objetivo de la ley es proteger los sistemas y datos del gobierno federal frente a la amenaza de filtraciones de datos de origen cuántico, antes del “Día Q”, el momento en que los ordenadores cuánticos sean capaces de descifrar los algoritmos criptográficos existentes. Los expertos creen que la computación cuántica avanzará hasta este punto en los próximos cinco a diez años, dejando potencialmente toda la información digital vulnerable a las ciberamenazas bajo los actuales protocolos de cifrado».
Lo mismo respecto a la Unión Europea, que avanzaba en recomendaciones para una agenda en ciberseguridad cuántica, considerando que los avances de la computación cuántica ponen en peligro la ciberseguridad de Europa al dejar obsoletos los actuales sistemas de cifrado y crear nuevos retos de ciberseguridad. Se visualiza que esto ocurrirá en los próximos cinco a diez años, dejando potencialmente toda la información digital vulnerable a los actores de ciberamenazas bajo los actuales protocolos de cifrado.
Chile debe avanzar en estos temas, pero también considerar la importancia de la formación de capital humano y tener políticas públicas de mediano a largo plazo. Iniciativas como Girls in Quantum son absolutamente destacables porque son complementarias a este trabajo de Estado.
Desde acá las felicitaciones a Elisa por su iniciativa, visión, liderazgo e impulso en estos temas que definirán el desarrollo tecnológico de los países en los próximos años.
